LAS
MATEMÁTICAS NO FALLAN
Dñª Cristina García Vaso,
Concejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Cieza y portavoz del Grupo
Municipal de IU, en su intervención en el Pleno Ordinario de 5 de abril de
2016, argumentando la postura de su grupo en contra de la aprobación de la
moción presentada por la Asociación Cieza+Vida, dijo textualmente:
“Ustedes fundamentan también su moción en el descenso de la población,
obviando que este descenso, no se debe a los 94.796 abortos producidos en 2014,
sino a otros factores como el descenso de la población inmigrante como
consecuencia de la crisis económica, el envejecimiento de la población, etc.”
Estas fueron exactamente sus palabras.
Pues bien, por mucho que ustedes se empeñen, si, según datos del
Instituto Nacional de Estadística, en el año 2014 había en España una población
total de 46.771.341 y en el año 2015 la población sufrió un descenso de 146.959
habitantes, quedándose en 46.624.382, sólo hace
falta un pequeño cálculo para constatar que si se añaden a la población de 2014
los 94.796 niños que no llegaron a nacer en ese año, porque “voluntariamente”
sus madres ejercieron el derecho a decidir sobre su cuerpo y fueron abortados, el
descenso de la población habría sido menor.
Hagan ustedes la cuenta y verán que, SI LAS MATEMÁTICAS NO FALLAN, el
descenso de población habría sido exactamente de 52.163 habitantes, casi dos
tercios menor, independientemente de los inmigrantes que regresaron a sus
países y del envejecimiento de la población (menos mujeres en edad fértil),
cosa que, por otro lado, no hace sino abundar en la necesidad de políticas de
apoyo a la maternidad por parte de las instituciones de gobierno, si no
queremos acabar siendo un país de ancianos, sostenido por los impuestos
derivados del IRPF de los trabajadores inmigrantes, que no tienen ningún
problema en crear familias más que
numerosas.
Cerca del 75% de las
mujeres que acuden a pedir ayuda a Cieza+Vida son extranjeras (sobre todo de
países de religión musulmana o de CentroEuropa) y por supuesto que ninguna de
ellas tiene la más mínima intención de abortar, pues consideran que serán sus
hijos los que, en años venideros, las sostendrán con su trabajo y ejercerán sus
derechos democráticos en España eligiendo a sus propios representantes, que
intentarán que sean sus leyes y sus costumbres las que imperen en nuestro país.
Seguramente yo no llegaré a verlo, pero es el futuro que se avecina si
no tomamos ninguna medida y a mí, como mujer, y por la hijas y las nietas que
tengo detrás, les digo sinceramente que no me gusta nada.
Continuaba Dñª Cristina su argumentación aludiendo a la disminución del
número de abortos voluntarios en 2014, con respecto a 2103, (concretamente hubo
13.984 menos). En Cieza+Vida nos alegramos mucho de esto, pero ahora es ella la que obvia que la vuelta a
sus países de mujeres inmigrantes y el descenso del número de mujeres en edad
fértil, así como la distribución sin receta en las farmacias de las famosas
píldoras del día después (cuya venta se ha disparado desde que entró en vigor
la actual ley) y la actuación de la gran familia provida, que atiende a más de
20.000 mujeres cada año, han tenido también influencia en este descenso.
En fin, se mire como se mire, está claro que algo tendremos que hacer
para mantener nuestro equilibrio demográfico y, si fuera posible, conseguir un
crecimiento vegetativo positivo, y
yo creo una de las medidas podría ser ayudar a las mujeres que quieren ser
madres para que, en caso de dificultades del tipo que sean, puedan también
ejercer su derecho a serlo.
Hagan cuentas y verán que, “si las matemáticas no fallan”, todos
saldríamos ganando.
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